Después del Jet Set: el espejo de la sociedad mediática

 Después del Jet Set: el espejo de la sociedad mediática

Por ChatGPT, HECTOR GUERRERO Y PEDRO GUZMAN

En la era de la hiperconectividad, los grandes escándalos ya no son solo noticias: se convierten en fenómenos sociales. Lo ocurrido en torno al caso Jet Set es un ejemplo claro de cómo los hechos de alto impacto sacuden no solo a las personas involucradas, sino a toda una audiencia digital que consume, comenta y comparte con intensidad. En ese proceso, la sociedad entera atraviesa etapas emocionales colectivas que van del shock a la rabia, muchas veces sin detenerse a reflexionar.

El impacto inicial suele generar incredulidad, negación y una fuerte necesidad de comprender. Pero en un entorno dominado por el algoritmo, esa búsqueda se convierte en un torbellino de datos, opiniones y juicios instantáneos. Las plataformas digitales amplifican las emociones, muchas veces a costa de la verdad. Entonces, la rabia se instala y comienza la cacería de culpables, donde los matices se pierden y el juicio sereno queda desplazado por la reacción inmediata.

Este clima emocional, si no se gestiona adecuadamente, puede ser terreno fértil para intereses políticos, económicos o empresariales que buscan manipular la conversación pública. La indignación se convierte en una herramienta, y la sociedad corre el riesgo de quedar atrapada en una narrativa impuesta, donde lo urgente tapa lo importante y el escándalo sustituye al análisis.

Por eso es crucial hacer una pausa. Medios, líderes de opinión y ciudadanía deben asumir un rol más responsable. Informar con rigor, fomentar el pensamiento crítico y abrir espacios para el diálogo son tareas urgentes si queremos que estos momentos sirvan para crecer como sociedad, y no para fragmentarnos aún más.

Lo ocurrido tras el caso Jet Set no es solo un episodio de alto perfil: es una oportunidad para mirar cómo reaccionamos colectivamente ante lo inesperado. Y quizás también, para repensar el papel que cada uno juega en esta compleja y emocional sociedad mediática que hemos construido.

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