Un dato alarma a las aerolíneas de Estados Unidos aunque la cantidad de vuelos ya es casi la misma que antes de la pandemia
Millones de estadounidenses saturaron los aeropuertos el pasado fin de semana al tiempo que las muertes por coronavirus aumentan en todo Estados Unidos y expertos en salud pública ruegan a la población permanecer en casa y evitar las grandes reuniones por el Día de Acción de Gracias. Y se prevé que el próximo domingo sea el día más ajetreado del periodo vacacional.
Pero, aunque los tres millones de personas que pasaron por el punto de revisión de los aeropuertos de EEUU de viernes a domingo representaron la mayor cantidad desde mediados de marzo -cuando la crisis del COVID-19 azotó al país-, las aerolíneas pueden preocuparse por un dato de una importante diferencia a los años anteriores.
Pese a que la cantidad de vuelos en el cielo de EEUU en fechas cercanas al día de Acción de Gracias ya superó a las cifras de 2018 y es similar a las de 2019, la Administración de Seguridad en el Transporte(TSA) reveló que el número de personas que viajan vía aérea para este fin de semana feriado es menor a la mitad del año pasado.
Flight Radar, una página web que permite rastrear la ubicación de aviones en tiempo real, puso como ejemplo de esta situación que en EEUU alrededor del mediodía del martes previo al festejo de Acción de Gracias hubo 6.815 vuelos en 2018, 7.630 vuelos en 2019 y 6.972 vuelos este 2020. Pero la TSA advierte que la gran diferencia está en que el 23 de noviembre de 2019 volaron 2.254.188 personas y el 23 de noviembre de este año volaron 917.354 personas.
De todos modos, sigue siendo alarmante que en plena pandemia muchos viajeros no estén dispuestos a perderse una reunión familiar y estén convencidos de que pueden hacerlo con precaución. A esto se suma que muchas universidades han terminado sus clases en persona, lo que aumenta el número de estudiantes que vuelven a casa.
Un caso que recogió la agencia de noticias AP es el de Laurie Pearcy, una directora de administración para un despacho de abogados en Minneapolis que viajó a Nueva Orleans para acudir a la despedida de soltera de su hija y a una pequeña cena de Día de Acción de Gracias con su hijo. “No quiero enfermar a nadie inconscientemente. Pero no quiero perderme este acontecimiento especial para mi única hija”, sostuvo.
Otro ejemplo de AP es el caso de Stephen Browning, un ejecutivo jubilado de Tucson, Arizona, que volará a Seattle para pasar el Día de Acción de Gracias con su hermana. La reunión por lo general es de hasta 30 personas; este año, solo 10 acudirán, y a todos los invitados se les ha pedido realizarse una prueba de coronavirus. Browning no piensa quitarse el cubrebocas para comer o beber durante el vuelo. “Este es mi primer vuelo desde diciembre de 2019, por lo cual tengo mis dudas”, dijo. “Pero pienso que la mayoría de las aerolíneas ahora actúa con responsabilidad y obliga a usar mascarillas en todos los vuelos”